La autorregulación del aprendizaje es la habilidad para coordinar los pensamientos y las conductas para resolver problemas complejos. Los docentes debemos conocer la forma en que los estudiantes aprender y las estrategias que usan al enfrentarse a conflictos o enigmas.
Es importante que los docentes conozcamos la relación entre las neurociencias y la práctica educativa en todos los niveles. Las habilidades de autorregulación pueden ser aprendidas y entre más estrategias y modelos se tengan más se incrementará está habilidad.
Alcanzar nuestras metas de aprendizaje es un ideal de todos, para ellos debemos sortear las barreras de este camino. La atención y las funciones específicas son las dos funciones que se activan en la autorregulación; la primera de ellas para mantener la actividad y concentración necesaria para procesar la información; la segunda el conjunto de procesos para controlar y organizar nuestro pensamiento y nuestra conducta.
La autorregulación cumple funciones fundamentales una es la capacidad es enfrentarse a problemas y resolverlos, y la otra es la de adaptarse o proyectarse activamente y sanamente a los códigos sociales.
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