La actividad de escribir es la aprendizaje académico básico que menos ocupamos en la vida real, por ejemplo únicamente la utilizamos para escribir algún número telefónico, transcribir una receta, anotar una dirección, rellenar algún formulario, estas acción de escritura no llevan más de 3 minutos y no presentan algunas secuencias básicas de la escritura como la planeación, redacción y corrección. Así los niños no tienen ningún modelo a seguir en ese aspecto, por eso tenemos que empezar desde pequeños a favorecer esta actividad. Les sugiero la siguiente rincón de trabajo:
El buzón de cartas
– Comentar a los alumnas y alumnos que haremos una actividad en el salón para escribirnos recados y notas entre nosotros.
– Asignara en colectivo una zona especifica del salón para colocar el buzón de cartas de cada niños
– Proseguir con la confección del buzón y el decorado del mismo.
– Primero debemos escoger alguno de nuestro compañero o compañeras para escribirle una carta.
– Después se entregará a cada niños la carta que le hayan escrito (dejo a su criterio selección con anticipación el emisor y destinatario o en su defecto tener catas preparadas para los niños o niñas que no reciba).
– Proseguir con la corrección de los escritos
– Se regresarán los escritos al emisor para su reelaboración.
¿Cómo desarrollarlo como rincón?
– Una vez hecha esta actividad introductoria mencionaremos a los alumnos que nuestros buzones siempre quedarán abiertos y que pueden escribir a cualquiera de sus amigos en el momento que sea necesario.
– Aclarar que los momentos de escritura son después que hayan terminado sus actividades de clases (en su tiempo libre).
– Cada vez que les llegue una carta tendrán que responderla
¿Cómo asesora el maestro o la maestra?
Es posible que poco niños nos pidan ayuda para redactar su carta, tal vez sólo se acerquen para aclarar de escritura de palabras complicadas, es bueno dejarlos escribir sus escritos como ellos puedan ya que se sientes más confiado. Una alternativa para solucionar esto es revisar los buzones de cada niños después de la hora de clases, así podemos revisar el sentido del mensaje, ortografía, semántica, etc. Realizar una categorización y registro de los fallos más comunes y los específicos para diseñar planeaciones que contemplen estos contenidos.
Variantes:
– Hacer sólo un buzón y nombrar diariamente o semanalmente un cartero.
– Poder colocar un buzón afuera del salón con el nombre “CORREO DE LA ESCUELA”, así tendremos otra actividad para poder organizarnos en equipo.